Este 9 de Noviembre de 2019, se cumplen 30 años del final de una época histórica: La Caída del Muro de Berlín.
Todo partió con el fin de la Segunda Guerra Mundial, cuando Inglaterra, Francia, EE.UU y la Unión Soviética, derrocaron al nacional socialismo alemán de Hitler. Berlín, muy apetecida por su posición estratégica al centro de Europa fue dividida y administrada por las potencias vencedoras. Más tarde, Francia, EE.UU e Inglaterra se unificaron formando la República Federal Alemana o RFA (capitalista) y por el otro lado de la mano de la URSS, se formó la República Democrática Alemana o RDA. Esto como consecuencia del "bloqueo de Berlín" por parte de la URSS como respuesta a la reforma monetaria implementada por los occidentales. Los soviéticos respondieron con un bloqueo de los tres sectores de Berlín Occidental, por supuestas "dificultades técnicas" afectando a 2.1 millones de personas. Lo que dio origen a la operación humanitaria más importante de la historia "El Puente Aéreo" de EE.UU.
Ambos territorios si bien estaban subdivididos y controlados por distintos gobiernos compartían capital humano y recursos, muchos alemanes de la RDA trabajaban en la RFA, donde había más oportunidades de empleo y una notoria hegemonía económica, esto causó la inmigración de alrededor de 2,5 millones de alemanes a la Alemania del Oeste. La RDA no veía con buenos ojos este éxodo, la Alemania Occidental captaba la fuerza de trabajo, y al ritmo que iban, pronto se quedarían sin suficientes recursos humanos para sostener su sistema socialista.
"No podían comprender las autoridades del Este que la construcción del paraíso socialista tuviera desertores tan torpes como para preferir vivir en las decadentes sociedades capitalistas" (Garzón, Dionisio. El Muro de Berlín: El final de una época histórica. Instituto res pública, año 2014)
Fue así como tras reuniones secretas del consejo de ministros de la RDA, se resolvió la construcción del Muro, el presidente del consejo de estado Walter Ulbricht incluso dijo meses antes que nadie tenía la intención de construir un muro. Lo llevaron a cabo en total hermetismo, concretándose un día domingo, el 13 de agosto de 1961, durante la madrugada. Muchas personas se encontraron al día siguiente con el patio de su casa del otro lado del muro, ya no podrían visitar el cementerio que quedaba del otro lado, y el tránsito se vio interrumpido.
Así nace el "Muro de la Vergüenza" el nombre con el que se bautizó el muro, del lado oriental le llamaron "Muro Antifascista". El Muro fue y será el reconocimiento más patente del fracaso del modelo socialista en el mundo; el capitalismo puede no ser perfecto, pero nunca ha tenido que coartar la libertad de sus ciudadanos para implementarse, en la manera que lo hicieron con el Muro de Berlín. Fue así como durante 28 años los berlineses del Este vivieron bajo constante vigilancia, y crisis económicas, en completo anacronismo, en un mundo donde se producían los mayores avances tecnológicos. Se dice que al finalizar una conversación por teléfono era normal saludar "al escucha". Muchos alemanes continuaron escapando al otro lado, construyeron túneles y organizaron escapes cinematográficos, uno incluso desde una panadería, donde lograron escapar solo 57 personas de las más de 100 que intentaron la huida, ya que fueron descubiertos antes.
Los soviéticos tenían planeado continuar con el Muro una década más y por qué no, prolongarlo al nuevo milenio, de hecho ya habían invertido en la que sería la nueva tecnología que lo protegiera, pero los acontecimientos quisieron otra cosa. El ambiente político mundial era el declive del comunismo y personajes como Margaret Thatcher en Inglaterra o Ronald Reagan en EE.UU lideraban las ideas de libertad económicas. En junio de 1987 Reagan pronuncia frente a la puerta de Brandenburgo, su mítico discurso "Mr. Gorvachov Tear Down This Wall", "Sr Gorvachov derribe este muro" que se volvió profético.
Aunado a la crisis económica, protestas y el aumento de las solicitudes de permisos para ir al otro lado, la RDA comenzó a abrirse a la posibilidad. Fue así como sin violencia, o balas el 9 de noviembre de 1989 en una conferencia se le consultó al secretario de información de la RDA Günter Schabowski desde cuando los berlineses podrían circular libremente y respondió sin medir sus palabras: "desde este momento". Al escuchar esto por las medios, casi de forma inmediata los berlineses del este salieron a las calles llenos de júbilo dispuestos a cruzar y derribar con sus propias manos el muro, ante las miradas atónitas de los guardias que no fueron avisados, y que no pudieron hacer nada frente a la multitud que se alzaba poderosa.
En los momentos que vive latinoamérica, donde gobiernos socialistas son elegidos a pesar de la corrupción como el caso de Argentina, o que deciden perpetuarse en el poder por la vía ilegítima como en Bolivia, es que tenemos que echar un vistazo a la historia, y valorar por sobre todo nuestra libertad. Vivimos en un territorio donde todavía las ideas que coartaron la libertad de millones de personas y causaron hambre, tienen éxito y son acogidas por una gran mayoría. Cuesta creer que pese a todas las evidencias que ofrece la historia, incluído el Muro, aún a la gente le quepa alguna duda de que el modelo socialista y comunista es represivo, limita nuestra libertad, no prospera, y siempre termina por imponerse a la fuerza, ya que sus ideas no son tan buenas para ser elegidos o continuar siendo elegidos por la vía democrática.
Todo partió con el fin de la Segunda Guerra Mundial, cuando Inglaterra, Francia, EE.UU y la Unión Soviética, derrocaron al nacional socialismo alemán de Hitler. Berlín, muy apetecida por su posición estratégica al centro de Europa fue dividida y administrada por las potencias vencedoras. Más tarde, Francia, EE.UU e Inglaterra se unificaron formando la República Federal Alemana o RFA (capitalista) y por el otro lado de la mano de la URSS, se formó la República Democrática Alemana o RDA. Esto como consecuencia del "bloqueo de Berlín" por parte de la URSS como respuesta a la reforma monetaria implementada por los occidentales. Los soviéticos respondieron con un bloqueo de los tres sectores de Berlín Occidental, por supuestas "dificultades técnicas" afectando a 2.1 millones de personas. Lo que dio origen a la operación humanitaria más importante de la historia "El Puente Aéreo" de EE.UU.
¿Por qué se construyó el Muro?
Luego de desaparecer el lazo que unía a los países contra Alemania, la guerra "caliente" (2da Guerra Mundial) pasó a una "Guerra Fría".Ambos territorios si bien estaban subdivididos y controlados por distintos gobiernos compartían capital humano y recursos, muchos alemanes de la RDA trabajaban en la RFA, donde había más oportunidades de empleo y una notoria hegemonía económica, esto causó la inmigración de alrededor de 2,5 millones de alemanes a la Alemania del Oeste. La RDA no veía con buenos ojos este éxodo, la Alemania Occidental captaba la fuerza de trabajo, y al ritmo que iban, pronto se quedarían sin suficientes recursos humanos para sostener su sistema socialista.
"No podían comprender las autoridades del Este que la construcción del paraíso socialista tuviera desertores tan torpes como para preferir vivir en las decadentes sociedades capitalistas" (Garzón, Dionisio. El Muro de Berlín: El final de una época histórica. Instituto res pública, año 2014)
Fue así como tras reuniones secretas del consejo de ministros de la RDA, se resolvió la construcción del Muro, el presidente del consejo de estado Walter Ulbricht incluso dijo meses antes que nadie tenía la intención de construir un muro. Lo llevaron a cabo en total hermetismo, concretándose un día domingo, el 13 de agosto de 1961, durante la madrugada. Muchas personas se encontraron al día siguiente con el patio de su casa del otro lado del muro, ya no podrían visitar el cementerio que quedaba del otro lado, y el tránsito se vio interrumpido.
Así nace el "Muro de la Vergüenza" el nombre con el que se bautizó el muro, del lado oriental le llamaron "Muro Antifascista". El Muro fue y será el reconocimiento más patente del fracaso del modelo socialista en el mundo; el capitalismo puede no ser perfecto, pero nunca ha tenido que coartar la libertad de sus ciudadanos para implementarse, en la manera que lo hicieron con el Muro de Berlín. Fue así como durante 28 años los berlineses del Este vivieron bajo constante vigilancia, y crisis económicas, en completo anacronismo, en un mundo donde se producían los mayores avances tecnológicos. Se dice que al finalizar una conversación por teléfono era normal saludar "al escucha". Muchos alemanes continuaron escapando al otro lado, construyeron túneles y organizaron escapes cinematográficos, uno incluso desde una panadería, donde lograron escapar solo 57 personas de las más de 100 que intentaron la huida, ya que fueron descubiertos antes.
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| En todo el mundo se hizo famosa como un "salto a la libertad" la fotografía de Conrad Schuman, un cabo soviético de 19 años que el 15 de agosto de 1961, saltó la alambrada en la calle Bernauer hacia Berlín Oeste |
La Caída del Muro
Los soviéticos tenían planeado continuar con el Muro una década más y por qué no, prolongarlo al nuevo milenio, de hecho ya habían invertido en la que sería la nueva tecnología que lo protegiera, pero los acontecimientos quisieron otra cosa. El ambiente político mundial era el declive del comunismo y personajes como Margaret Thatcher en Inglaterra o Ronald Reagan en EE.UU lideraban las ideas de libertad económicas. En junio de 1987 Reagan pronuncia frente a la puerta de Brandenburgo, su mítico discurso "Mr. Gorvachov Tear Down This Wall", "Sr Gorvachov derribe este muro" que se volvió profético.Aunado a la crisis económica, protestas y el aumento de las solicitudes de permisos para ir al otro lado, la RDA comenzó a abrirse a la posibilidad. Fue así como sin violencia, o balas el 9 de noviembre de 1989 en una conferencia se le consultó al secretario de información de la RDA Günter Schabowski desde cuando los berlineses podrían circular libremente y respondió sin medir sus palabras: "desde este momento". Al escuchar esto por las medios, casi de forma inmediata los berlineses del este salieron a las calles llenos de júbilo dispuestos a cruzar y derribar con sus propias manos el muro, ante las miradas atónitas de los guardias que no fueron avisados, y que no pudieron hacer nada frente a la multitud que se alzaba poderosa.
En los momentos que vive latinoamérica, donde gobiernos socialistas son elegidos a pesar de la corrupción como el caso de Argentina, o que deciden perpetuarse en el poder por la vía ilegítima como en Bolivia, es que tenemos que echar un vistazo a la historia, y valorar por sobre todo nuestra libertad. Vivimos en un territorio donde todavía las ideas que coartaron la libertad de millones de personas y causaron hambre, tienen éxito y son acogidas por una gran mayoría. Cuesta creer que pese a todas las evidencias que ofrece la historia, incluído el Muro, aún a la gente le quepa alguna duda de que el modelo socialista y comunista es represivo, limita nuestra libertad, no prospera, y siempre termina por imponerse a la fuerza, ya que sus ideas no son tan buenas para ser elegidos o continuar siendo elegidos por la vía democrática.
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